El hombre que construyó San Juan Bautista: Coronel Santos Miño.


121- Coronel Santos Miño. San Juan Bautista. “El gran constructor de la capital departamental”. Fue el hombre que formó la ciudad. Creó el distrito, edificó la Iglesia, Escuela de varones y niñas. Construyó la comandancia del Ejército y todas las obras del poblado. Según cuenta en su libro “Antecedentes del Centro Democrático” Saturnino Ferreira Pérez, nuestro ilustre de la fecha fue un héroe de la Guerra Grande, habiendo combatido hasta Avay donde cayó prisionero. No volvió a reincorporarse al Ejército como lo hicieron otros compañeros eludiendo la vigilancia de los enemigos. Una vez culminada la guerra se reincorporó a las fuerzas del General Bernardino Caballero en contra del gobierno de Jovellanos y Benigno Ferreira. La revolución del “centauro de Ybycuí” triunfó y por Decreto del 30 de noviembre de 1875 fue nombrado Comandante Militar y Jefe Político de San Ignacio Misiones.
Sin embargo, al llegar a San Ignacio las tuvo difícil. La acusación que pesaba en su contra de haber cooperado con el enemigo una vez caído prisionero no le permitió una efectiva socialización en la comarca al cual fue enviado. Ello es alimentado por la oposición tenaz que encuentra en ex compañeros de guerra como el Sargento Mayor Rosendo Céspedes y por sobre todo las Escoltas de Madama Lynch, María del Socorro Palacios y Toribia Acosta.
Ello obligó a Santos Miño a trasladar la guarnición militar a San Juan en enero de 1876, decisión que fue ratificada por Decreto del Poder Ejecutivo. Duró en el cargo hasta el 17 de octubre de 1889, fecha en que fue reemplazado por el Sargento Mayor Juan A. Afara.
Nuestra fuente sigue señalando que nuestro ilustre de la fecha también adquirió con su esposa Marcelina Valdovinos y su cuñado Ubaldo Galli extensiones de campo entre San Miguel y San Juan Bautista, al igual que en la zona del Ñeembucú. Fundó la primera Comisión Departamental de la Asociación Nacional Republicana en 1887 en el mes de octubre y luego por varios años fue presidida por su cuñado Ubaldo Galli.
El 4 de agosto de 1891 por Decreto del Poder Ejecutivo es promovido al grado de Coronel del Ejército paraguayo y según cuenta Nanino Ferreira en la Pág. 184 del libro ya citado, la polca “18 de Octubre” en principio era en su homenaje. Pero ocurre la siguiente historia: “Los sobrevivientes autores de la polca “Coronel Santos Miño” vienen a Asunción y le hacen escuchar al Coronel Juan B. Egusquiza, considerado héroe del triunfo del gobierno en el golpe cuartelero y explicándole que fue escrita en homenaje del pueblo de San Juan Bautista al finado Coronel. El coronel Egusquiza le expresa: “le cambiaremos de nombre y le daremos uno en homenaje a todos los que han muerto en defensa del orden y las instituciones, le pondremos 18 de octubre.
Nuestra fuente asegura que los datos narrados se encuentran en el libro “Historia de la Cultura Paraguaya, Pág. 415” autoría de Carlos R. Centurión y que en la misma se refiere que la citada polca era nueva, sin nombre, que por entonces era recién conocida y que a sugerencia del Gral. Egusquiza se le puso el nombre de “18 de Octubre” en nombre de todos los que murieron en defensa del gobierno en dicho acto.
Por su parte, Alberto Candia, periodista del diario ABC Color en la publicación del miércoles 17 de octubre de 2007, ratifica la historia de Nanino y en un pasaje señala que “cuando el teniente coronel Santos Miño fue ascendido a coronel (según el decreto verificado), Cornelio se puso muy contento por la suerte de su apreciado jefe. Entonces se reunió con su conjunto “Los Forestales” y resolvieron componer una “música” en ritmo de galopa (polka) para homenajear al respetado guía y amigo. Para mediados de setiembre, la obra ya estaba definida y totalmente terminada, titulándose, como estaba previsto, “Coronel José Santos Miño”. La paradoja de la vida hizo que el grupo no tuviera manera de presentar la obra al destinatario o estrenarla mínimamente en algún acontecimiento o, en su defecto, tocarla en una serenata. Los graves acontecimientos políticos que se cernían sobre la capital obligaron al coronel Santos Miño y su ayudante Cornelio Barrios a permanecer acuartelados en el “Batallón Escolta” (El Paraguayo Independiente y 14 de Mayo) donde prestaban sus servicios”, concluye.
Por haber formado parte de la rica historia misionera y construido la capital departamental, hoy forma parte de nuestra galería de hombres ilustres del Bicentenario, desde la perspectiva de Misiones.

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